martes, 26 de febrero de 2013


…CONTINUACIÓN

02. ROUSSEAU

Henri Rousseau terminó con la visión sensual, exótica y mágica que sobre lo primitivo había sembrado Gauguin. Rousseau, ironías de la vida, nunca conoció los parajes exóticos y de ensueño que reflejaban sus cuadros para los que se inspiraba en sus paseos por los invernaderos del Jardín Botánico.



Una de las anécdotas más referenciadas por los estudiosos es el banquete que, en honor a Rousseau, organizó Picasso en su propio estudio en 1908: el Aduanero “tomó con la mejor fe un homenaje que se rendía a su genio (...) el proyecto entusiasmó a todo el grupo, encantado de poder gastarle una broma al aduanero (...) después de cenar todo Montmartre desfiló por el estudio.” Fernande Olivier la pareja de Picasso por aquellos años, llega a detallar las escenas de compañerismo que se produjeron en aquella velada en la que no faltaron vino, comida y música: Rousseau deleitó con su violín a los presentes y Apollinaire dejó escrito el poema dedicado a Rousseau y que posteriormente favoreció la leyenda sobre la estancia en México del pintor naïf. Su obra forma parte de las adquisiciones del Louvre y sigue siendo para muchos visitantes un artista que, como tantos otros, acabaría sus días en soledad y sumido en una pobreza tal que hasta su amigo Delanuay y su casero tuvieron que comprarle la lápida en la que “Apollinaire escribió un poema de despedida.

CONTINUARÁ…

viernes, 22 de febrero de 2013

PASEO NAÏF


Con ocasión de la próxima X Muestra Europea de Arte Naif que desde el 16 de marzo hasta el 23 de mayo de 2013 se exhibirá en la Galería Éboli, se van a divulgar en este Blog algunas ideas que se han emitido sobre el origen y evolución de esta forma de expresión pictórica.

01. ROUSSEAU

Este arte ingenuo o naif se descubrió en los primeros años del siglo XX y también en el mismo corazón del mundo civilizado; todos los artistas de las vanguardias se sintieron profundamente atraídos ante una forma de arte muy ingenuo y puro que surgía del hombre adulto; fue precisamente Kandinsky quien calificó el naif de “gran realismo” cuando conoció y adquirió obra de Henri Rousseau, el primer naif que empieza a prestigiarse desde las altas esferas de la vanguardia.



Apodado por su ocupación laboral como “El Aduanero”, Henri Rousseau mostró por primera vez su obra en 1886 cuando se atrevió a colgarla de las paredes del “Salón des Indépendants” y, aunque sufrió la burla de la mayoría de los presentes, pensadores y artistas de talla se sorprendieron de la capacidad expresiva de sus cuadros: Picasso fue uno de ellos y como solía ser común en su personalidad, supo captar la esencia innata del naíf.


La gitana durmiente

En aquellos años en que el genio no disfrutaba de una situación económica holgada, compró por cinco francos a un asiduo admirador suyo,un tendero al que llamaban el tío Soulier, un cuadro que éste tenía del aduanero. Si la construcción interpretativa de Cézanne y de otras tendencias primitivas habían sido capitales para Picasso, sin duda la interpretación ingenua, pura y carente de normas restrictivas del naif fascinaría nuevamente al genio: efectivamente, lo más difícil para el hombre experimentado es liberarse de los conocimientos adquiridos y volver al estado primigenio inicial, estado en que el artista copia sin prejuicios lo que tiene delante.

CONTINUARÁ...